Sin Titulo
En nada, probablemente en nada. Esa, es su relación más importante. Su parecido radica en absolutamente nada.
En el vació no se encuentra nada, se encuentra todo. Ahí, en el vació, radica la imaginación, los niños saben de eso. Lo saben porque están vacíos de información inútil. Los demás, los mas informados, vivimos carentes de vació. Llenamos todo con algo, solo eso, algo. Lo llenamos de cosas inservibles, como esta frase.
La importancia de estos textos, definitivamente, no radica en una moraleja. Ya decía Oscar Wilde que: “La rebeldía a los ojos de todo aquel que haya leído algo de historia, es la virtud original del hombre.” Debemos admirar a los hombres que deciden rebelarse. A los hombres que rompen todo aquello que es aceptado como correcto, para por fin, hacer algo nuevo.
A eso, a lo nuevo, lo llamamos inútil, a lo inútil, lo llamamos vació. Somos incapaces de imaginar cosas llenas, debido a nuestra falta de vació. Y es eso, el vació, lo que debe de llenar los espacios.
En cambio, los espacios los llenamos con lugares comunes. Nos ahogamos en ellos y nos terminan por conducir a la locura. Nuestras conversaciones carecen de vació, cuando ocurre un vació, nos apresuramos a terminar con el. Tajantemente, lo eliminamos.
Las formas son absurdas, pero eso, eso no nos interesa. Nos interesa lo que es correcto, lo que es aceptado según los demás. Desde que se invento la servilleta, ya nadie es capaz de meter su mano en la comida y después, limpiarla en su compañero de la derecha.
Un vació, es la mejor manera de decirle a alguien, lo que quiere escuchar, y de pensar, lo que queramos pensar. Un vació es la forma mas correcta de burlarse. Burlarse, es la forma mas correcta de criticar. Así, que podemos decir que el vació, es el comentario mas critico y mas preciso que se puede hacer en todo momento.
Lo mejor que podemos decir de esto es:
En nada, probablemente en nada. Esa, es su relación más importante. Su parecido radica en absolutamente nada.
En el vació no se encuentra nada, se encuentra todo. Ahí, en el vació, radica la imaginación, los niños saben de eso. Lo saben porque están vacíos de información inútil. Los demás, los mas informados, vivimos carentes de vació. Llenamos todo con algo, solo eso, algo. Lo llenamos de cosas inservibles, como esta frase.
La importancia de estos textos, definitivamente, no radica en una moraleja. Ya decía Oscar Wilde que: “La rebeldía a los ojos de todo aquel que haya leído algo de historia, es la virtud original del hombre.” Debemos admirar a los hombres que deciden rebelarse. A los hombres que rompen todo aquello que es aceptado como correcto, para por fin, hacer algo nuevo.
A eso, a lo nuevo, lo llamamos inútil, a lo inútil, lo llamamos vació. Somos incapaces de imaginar cosas llenas, debido a nuestra falta de vació. Y es eso, el vació, lo que debe de llenar los espacios.
En cambio, los espacios los llenamos con lugares comunes. Nos ahogamos en ellos y nos terminan por conducir a la locura. Nuestras conversaciones carecen de vació, cuando ocurre un vació, nos apresuramos a terminar con el. Tajantemente, lo eliminamos.
Las formas son absurdas, pero eso, eso no nos interesa. Nos interesa lo que es correcto, lo que es aceptado según los demás. Desde que se invento la servilleta, ya nadie es capaz de meter su mano en la comida y después, limpiarla en su compañero de la derecha.
Un vació, es la mejor manera de decirle a alguien, lo que quiere escuchar, y de pensar, lo que queramos pensar. Un vació es la forma mas correcta de burlarse. Burlarse, es la forma mas correcta de criticar. Así, que podemos decir que el vació, es el comentario mas critico y mas preciso que se puede hacer en todo momento.
Lo mejor que podemos decir de esto es:
4 comentarios:
esto fue como un tributo a olallo no? mm... raro, raro...
La imaginaci�n vive en vac�o. S�. Y hoy todos viven en un vac�o sin imaginaci�n porque ya no leen, prefieren ver las im�genes que crearlas ellos. Una persona muy est�pida del Cumbres, a qui�n llamaremos Emilio Zabal, me dijo que �l no le�a porque los libros buenos terminaban hechos pel�culas. Muchos piensan as� y dejan la imaginaci�n de lado. Consumen im�genes sin comprenderlas. En este nuevo siglo los j�venes ya no queremos escribir porque no le encontramos prop�sito, cuando hace cien a�os era una necesidad. Los que leemos y los que escribimos vivimos en un vac�o imaginario que puede serlo todo y puede ser nada. A los dem�s mexicanos que prefieren leer el TV y Notas y el TV y Novelas. S�lo ven Televisa y TV Azteca y los �nicos libros que tienen en su casa son los de la escuela. La televisi�n les pudre todas las ideas, mata su imaginaci�n, hace que nada crean, destruye toda su ilusi�n. Su mente se transforma en un in�til reflector que se conforma con ver figuras y no crearlas. Esta sociedad nuestra se ha convertido en un asco cultural.
Pedro
Anonimo: No se quien seas, me gustaria que dieras tu nombre. Respondere tu comentario.
No se que tan bien me conozcas, soy muy MUY fan de olallo. Pero nunca pense en nada acerca de el cuando hice este texto. ¿Por que lo dices?
No es que me moleste, al contrario, soy muy fan, estaria bien hacerle un tributo a olallo. Definitivamente estoy influenciado por el para todo. Pero no siento que en este texto en especial lo haya hecho. En ningun momento pense en algo que haya dicho olallo. De hecho creo que este texto, en especial este, es mucho mas influenciado por Abel Membrillo.
Respeto tu opinion, como todas, pero me gustaria que me explicaras porque lo dices.
Ya habiendote dado mi opinion solo me queda por decir... EXCELENTE CONCLUSION !!!
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