martes, 25 de septiembre de 2007

Oops!

Hace no mucho, pero si algun tiempo, me queje publicamente y exhorte a la gente a llamar a las cosas por su nombre, si no lo recuerdan, den click aqui. Hoy, entre a un blog, por azares del destino, o por otras razones, pero no tengo pensado extenderme en ese tema. Yueni hizo el amabilisimo favor de callarme la boca, o las yemas de los dedos, como lo quieran ver. Chequen ustedes, nomas:
Chale, que oso. Vean toda su entrada aqui.

4 comentarios:

andrea dijo...

siempre pensé que era leyenda urbana....cada día se "descubre" algo nuevo jaja

Manolo dijo...

jajaja... ya decía yo, que eso de fruti lupis no salió de la nada

Mme. Carroll dijo...

No mames qué de huevos! Yo les digo así, Fruti Lupis pero no creo que haya sido por eso de que existieron de verdad bajo ese nombre, digo, soy una niña todavía, tengo catorce años y así, seguro fue un impulso lingüístico como lo de llamar a mi carnal Pocholoc en lugar de Carlos... chale, de verdad quiero tener catorce años, así mis comentarios y mi todo no sería tan inmaduro, estaría ad hoc.

Wu* dijo...

y lo seguiré diciendo, es una gran palabra... :)